Motor estacionario

Los motores estacionarios pueden venir en una gran variedad de tamaños y ser usados en distintas tecnologías, entre las que se incluyen: En la época victoriana hubo muchos intentos de reemplazar las locomotoras con motores estacionarios, en el suelo lo que era ineficiente para mover algo tan grande y pesado como una locomotora.

El transporte mediante cables se muestra viable donde la pendiente es excepcionalmente inclinada, como en uno de...

Los motores son frecuentemente de gasolina, aunque en algunos casos por economía es posible cambiar a un funcionamiento por parafina después de que la máquina se haya calentado (esto requiere que la entrada se haya calentado para poder vaporizar este combustible tan poco volátil).

Sus usos típicos suelen ser generación de electricidad y bombeo a gran escala.

La velocidad del motor es medida mediante un par de masas que se mueven junto con el cigüeñal.

Según aumenta la velocidad, la fuerza centrífuga hace que las masas se desplacen hacia el exterior, venciendo la resistencia de un resorte o muelle.

Estos motores son llamados "golpea y pierde" (también se les llama "golpea o pierde") porque no realizan trabajo en cada ciclo ya que no producen chispa si el motor va a cierta velocidad, y la válvula de escape se mantiene abierta.

En el Reino Unido hay unos pocos museos donde los visitantes pueden ver motores estacionarios funcionando.

Tres motores estacionarios de gasoil