Morirás en Chafarinas es una película dirigida en 1995 por Pedro Olea, basada en la novela homónima escrita por Fernando Lalana en 1990.
En un acuartelamiento español de Regulares en Melilla se han producido varias muertes.
El capitán Contreras encarga al soldado Cidraque que investigue la posible relación entre ellas, pero a medida que se empiezan a descubrir hechos, Cidraque es rápidamente apartado del caso.
Si bien la película empieza siguiendo con cierta fidelidad el relato original, en el último tercio del metraje la historia cambia marcadamente, especialmente cuando la acción se traslada a las islas Chafarinas que dan título a ambas obras.
El mismo Lalana realizó el guion de la película junto al director Olea.