El soberbio monumento fue erigido por suscripción popular del pueblo de Arequipa, que quiso así recordar al que durante espacio de 42 años fue su obispo y a toda su familia que desde su llegada a la Ciudad Blanca desde España en el siglo XVIII dedicó grandes esfuerzos y caudales en favor de las clases más desfavorecidas de esta ciudad.
En la parte frontal del monumento se colocó un letrero en bronce con la leyenda "Arequipa a sus benefactores los señores de Goyeneche".
En la capilla del Hospital Goyeneche se cantó un breve cántico y la comitiva salió a la explanada delante del establecimiento donde estaba congregado todo el pueblo de Arequipa.
Acto seguido, el escritor Juan C.Rossel leyó una inspirada poesía dedicada a Mons.
Terminado el acto, las autoridades presentes se dirigieron a los nuevos pabellones del Hospital, construidos a expensas de la Duquesa de Goyeneche, donde el Sr. J.A.L.