La montaña es un lugar sagrado para los budistas tibetanos, quienes creen que es la morada de una de las Cinco Hermanas Tsheringma;[3] «jo mo tshe ring mched Inga» - diosas protectoras femeninas (Jomo) del Tíbet y Bután, que fueron obligadas bajo juramento por Padmasambhava a proteger la tierra, la fe budista, y a la gente local.
Era conocida por los escaladores que iban de paso al Everest, y fue explorada por el geólogo inglés Noel Odell, en 1924.
En 1937, le fue expedido un permiso, tanto por «los tibetanos» como por el «marajá de Bután», para escalar la montaña sagrada a una expedición británica liderada por Freddie Spencer Chapman.
Seis porteadores acompañaron al equipo de cinco escaladores desde Pagri, cruzando el paso Sur La[8] hacia Bután.
Destaca en esta ascensión la desaparición de dos escaladores y un sherpa del segundo equipo a la cumbre un día después.
Lhatoo y Prem Chand, en su camino durante su intento exitoso a la cumbre, reportaron ver mucha actividad del Ejército Popular de Liberación en la carretera Lhasa-Chumbi.
Los tres escaladores desaparecidos eran relativamente inexpertos, y Lhatoo especuló más tarde que la pendiente de la arista afilada pudiera ser el lugar del incidente.