Molinos de Consuegra

Los molinos de viento fueron construidos en la primera mitad del siglo XIX.

[1]​ Estos, siguiendo la tipología del molino torre, establecida en Holanda entre los siglos XVI y XVII, presentan dos partes claramente diferenciadas: un cuerpo cilíndrico o torre formada por gruesos muros de mampostería encalada, que constituye el elemento sustentante, y una cubierta cónica giratoria de madera y cinc, que integra el conjunto motriz, manifestándose al exterior por el palo de gobierno y sus cuatro aspas rectangulares.

[1]​ En la segunda planta o «camareta» se ubica el cedazo, gran tamiz dentro de una cajón para separar la harina del salvado.

[1]​ En la tercera planta o «moledero», estancia donde el muro reduce su espesor proporcionando un espacio de mayor amplitud, se aloja el conjunto de la maquinaria, cuyo elemento más llamativa es la rueda catalina.

[4]​ Las cuatro aspas se cubren con unas lonas para recoger la fuerza del viento, esta fuerza es transmitida al eje de madera soportado por dos piedras a modo de cojinete de fricción; en el interior, sobre el eje esta la rueda catalina que es un engranaje con cuarenta dientes, la rueda catalina engrana con otro engranaje, la linterna, que hace girar a la piedra volandera sobre la piedra solera produciéndose la molienda del grano, el grano a moler se depositaba en la tolva y va cayendo por la canaleja al centro de las piedras de moler; la harina sale por el exterior de las piedras y es llevada a un canalón por donde caerá al cedazo y posteriormente a unos sacos.

Vista nocturna
Vista de los molinos, con el castillo de la Muela al fondo.
Molino al anochecer.