En este complicado episodio, Mòdùn demostró su valía tras robar un caballo y escapar a galope tendido hasta los dominios xiōngnú, salvándose de una muerte segura.
[2] Una vez demostrada su arrojo, Mòdùn comenzó a reunir un grupo de guerreros extremadamente leales.
En un primer momento, marchó vengativamente contra los dōnghú, la rama étnica más poderosa y colindante con los territorios xiōngnú.
Estas campañas, fortalecieron enormemente la figura de Mòdùn como el líder xiōngnú por decreto familiar y militar, consiguiendo el respaldo absoluto de toda la confederación, conquistando a las opiciones más críticas o recalcitrantes a su dominio.
[5] Cuando el soberano hàn avanzó contra él, Mòdùn mantuvo la suficiente sangre fría como para conducir al ejército adversario a una trampa en territorio montañoso, donde su caballería de élite y el grueso del ejército, logró producir un humillante asedio durante siete días en la montaña Baideng, durante los cuales Liú Bāng fue confinado y aislado frente a su línea de suministros y refuerzos.
Mòdùn murió en el año 174 a. C., siendo sucedido por su hijo, Jīzhōu (稽粥), quien fue intitulado como Lǎoshàng Chányú (老上單于).