Ritos latinos

Los ritos litúrgicos latinos usados en las áreas de la iglesia católica donde el latín fue el lenguaje dominante fueron durante muchos siglos no menos numerosos que los ritos litúrgicos de las iglesias orientales católicas.Muchos ritos locales que continuaban siendo legítimos incluso después de estos decretos fueron voluntariamente abandonados, especialmente en el siglo XIX.La mayoría de las órdenes religiosas que aún mantenían un rito propio decidieron, en la segunda mitad del siglo XX, adoptar el rito romano reformado tal como se revisó de acuerdo con los decretos del Concilio Vaticano II.Pasó por muchos cambios en el primer milenio y medio de existencia (ahora llamadas "misas pretridentinas").Los papas posteriores continuaron con los cambios, empezando con Pío XII, quien revisó las ceremonias de Semana Santa y ciertos otros aspectos del misal romano en 1955.[6]​ Incluso en Roma se celebra el rito romano con los ajustes a la edición típica en latín determinados por la Conferencia Episcopal Italiana.Es similar al rito romano, con algunas variantes en los textos y una ligera diferencia en el orden de las lecturas.[12]​ Es actualmente el único rito de la Misa ordinario existente de una orden religiosa; pero por virtud del indulto Ecclesia Dei, alguno individuos o pequeños grupos están autorizados a usar algunos ritos hoy ya no usados.No deben ser confundidos con los llamados libros litúrgicos Neo Galicanos publicados en varias diócesis francesas luego del Concilio de Trento, los cuales tienen muy poco o nada que ver con él.