Miróbriga turdulorum fue una ciudad de la España antigua, en la Bética, Beturia Túrdula, convento jurídico de Córdoba, que estaba situada cerca de la Tarraconense, en el camino de Augusta Emerita a Caesaraugusta.[2] Según la información extraída de las excavaciones, la fundación de la ciudad data del 30 a. C. aunque pudo haber sido ocupada anteriormente en época prerromana.Más tarde, durante la dinastía Flavia, el asentamiento se convertiría en un municipio de derecho latino.[1] La ciudad sería abandonada en torno al siglo II d. C., siendo excavada siglos más tarde, entre 1987 y 1988.[3][4][5] En la zona se han hallado numerosos restos, como esculturas o estelas, destacando una escultura de mármol del emperador Tiberio.