Tras destacar en juveniles y un breve paso por el campo aficionado, inició una prometedora carrera profesional.
[3] Considerado el mejor pelotari de su generación, para muchos Goñi desaprovechó su enorme talento debido a su afición a la juerga nocturna.
[4] En 2002 fue excluido de las semifinales del campeonato manomanista porque su empresa no confiaba en que pudiera pasar el control antidopaje.
[6] Después de diversos retornos a la competición profesional, la empresa ASPE le rescindió el contrato definitivamente en 2005.
En 2017 fue condenado a ocho años de prisión por detención ilegal, amenazas y lesiones.