Miguel Cercito

Felipe II le oyó predicar en El Pilar y al observar sus dotes y su buen hacer en dichas Cortes le propuso para obispo de Barbastro durante la celebración de esas mismas Cortes.

En su nombre tomó la posesión de la sede el canónigo D. Juan Cercito, sobrino suyo.

A los pocos meses celebró sínodo que dio comienzo el día 18 de mayo.

Se distinguió sobre todo este prelado por promover la devoción y el culto de San Ramón.

En el año 1594 consiguió de la Ciudad que se retiraran las horcas del monte desde el que el Santo obispo bendijo al pueblo cuando fue expulsado de su sede, y edificó allí una ermita dedicada a su advocación; a los pocos meses, el día 9 de agosto del mismo año, se colocó ya la primera piedra.