Michael Hopkins

Con Norman Foster, Richard Rogers, Terry Farrell y Nicholas Grimshaw, Hopkins fue una de las figuras principales en la introducción de arquitectura high-tech en Gran Bretaña.

El estudio pasó a ser reconocido por su combinación de técnicas ultra modernas con arquitectura tradicional, ampliando su paleta de materiales y formas.

[4]​[5]​ Junto con su mujer Patricia, Michael Hopkins recibió la Royal Gold Medal del RIBA en 1994.

El premio describe el trabajo de los Hopkins como "no sólo un asunto de explotar la tecnología para construir fantásticamente, ni sencillamente acomodar tareas difíciles y cambiantes de la forma más elegante, sino sobre todo de capturar en piedra y transmitiendo en bronce las mayores aspiraciones de nuestra era", alabando su contribución al debate sobre la "delicada relación entre modernidad y tradición" y añadiendo: "Para los Hopkins, el progreso ya no es una rotura con el pasado sino un acto de continuidad donde hábil e inteligentemente se integran elementos tradicionales como piedra y madera, con tecnología avanzada y ambientalmente responsable.

"[5]​ Michael Hopkins fue elegido miembro de la Royal Academy en 1992 y nombrado CBE y Knight Bachelor para sus servicios a la arquitectura.