[3] Tenía las patas más largas que su predecesor Hyracotherium.
Perdió, también con respecto a éste, un dedo, aunque se apoyaba normalmente sobre su dedo medio, a pesar de que los otros dos también eran usados.
Sus ojos eran redondeados y dispuestos más separados a los lados de la cabeza.
Los dientes eran igualmente más largos y parecidos a los de los caballos actuales,[4] al igual que su cavidad cerebral.
Como la mayoría de los caballos fósiles, Mesohippus era común en Norteamérica.