La coronilla en la cabeza, la garganta, el pecho y el vientre son de color amarillento pálido.
El abejaruco australiano es una especie común y puede encontrarse en el verano en áreas no forestadas en la mayor parte del sur de Australia y Tasmania, sin embargo se está volviendo cada vez más rara en parques suburbanos.
El macho le trae a la hembra insectos mientras ella excava la madriguera que será su nido.
La hembra pone entre 3 y 7 huevos blancos, que son incubados unos 24 días hasta la eclosión.
Aunque los abejarucos australianos son realmente inmunes a los aguijones de abejas y avispas, luego de capturarlas les restriegan el aguijón contra la percha para desprenderlo, cerrando los ojos para evitar, al romper la vejiga del veneno, que éste le salpique y le afecte la vista.