Melchior Joncar Ferrer

Se conserva su partida de bautismo, en la que aparece su apellido como Joncar.

No parece estar emparentado con otros músicos contemporáneos de apellido «Juncá», como Franisco, Manuel o Benet.

[4]​ Sin embargo, se conserva la composición que Joncar realizó para las oposiciones en la Biblioteca de Cataluña, el himno Pastorem canimus.

El suplicante, El cabildo granadino convocó las oposiciones a través de un sistema en el que los opositores enviasen, junto con su identidad, varias composiciones.

Joncar quedaría en tercer lugar, junto con José Cortasa y Nicolás Zabala, aunque los jueces manifestaron «algún temor que el aria no es música suya, pues es de buen gusto y no corresponde a este gran gusto».

Tras esta elección, las obras fueron enviadas a Pedro Aranaz, maestro de la Catedral de Cuenca, para que este también eligiera a su candidato favorito, que curiosamente también resultó ser Palacios.

[1]​[2]​[8]​ La mayor parte de su numerosa composición musical se conserva en la Catedral de Tarragona, consistente en su mayoría en música religiosa: misas, antífonas, cánticos, himnos, introitos, invitatorios, lamentos, motetes, responsorios, salmos, salves, arias, elogios, gozos, rondones, rosarios y villancicos.

[1]​ Se le puede considerar un compositor clásico, aunque influenciado por el barroquismo y la tradición hispánica de la música religiosa.