El matrimonio entre personas del mismo sexo en Israel realizado fuera del Estado israelí es legalmente reconocido, pero una boda homosexual no puede legalmente llevarse a cabo dentro de su territorio, ya que solo las autoridades religiosas pueden oficiar matrimonios, y ninguna permite el matrimonio a las parejas del mismo sexo.
El matrimonio civil solamente se aplica excepcionalmente, por lo que las parejas que no quieren contraer matrimonio a través de la religión deben hacerlo en el extranjero, (o más comúnmente en embajadas y consulados).
La autoridad religiosa que regula los matrimonios judíos es el Gran Rabinato de Israel y existen autoridades paralelas para las comunidades cristianas, musulmanas y drusas, con un total de 15 tribunales religiosos.
Estos regulan todos los matrimonios y divorcios de sus propias comunidades.
Las primeras bodas municipales no oficiales tuvieron lugar en agosto de 2009, tras la Marcha del Orgullo de Tel Aviv, en la que el alcalde Ron Huldai casó a cinco parejas.