Masserof tiene un relieve accidentado, con alturas que varían entre los 450 y 800 metros sobre el nivel del mar.
Los primeros asentamientos humanos se remontan a la Prehistoria, como la Cueva del Mançano con sus figuras humanas y animales de caza característicos del estilo de pintura rupestre deominado arte levantino.
En el año 1980 , el inglés Peter Pateman compra parte de la partida de Masserof, y lo que era la Alquería Árabe será convertida en un Museo del vino, con piezas antiguas del siglo XI al siglo XIX.
Un elemento característico de este sitio es que el viento, cuando sopla, suele hacerlo con mucha fuerza.
En Jalón circula un dicho popular sobre las virtudes curanderas de la manzanilla, que dice: (En el idioma local, valenciano) (Traducción al castellano) Otra planta que crece espontáneamente en las montañas masserofencas es el palmito, una palmera enana, propia del área del litoral y el prelitoral e inexistente al interior, de hojas palmipartidas que tienen la apariencia de unas manos abiertas con numerosos dedos.
Una especialísima calidad del palmito es su resistencia al fuego: es una planta que rebrota con mucha facilidad después de haberse producido un incendio forestal.