[1] El número de personas enterradas varía entre varios centenares o algunos miles, según las fuentes.
[2] Antiguamente era costumbre eslovena arrojar a los criminales en las foibe[cita requerida] (simas cársticas de la zona) del Carso cerca de Trieste, y seguidamente sacrificar un perro negro lanzándolo en la fosa para despreciar (en el otro mundo) las almas de esos criminales.
[4][5] Varios centenares o algunos miles,[cita requerida] de italianos fascistas y también civiles fueron arrojados a las foibe.
Unos eran primero fusilados; otras veces los arrojaban vivos; o eran atados de dos en dos, sólo uno recibía el tiro y eran lanzados juntos a la muerte en la fosa[cita requerida].
[13] Ese mismo año, salió a la luz en Italia un estudio titulado Vittime di nazionalità italiana a Fiume e dintorni (1943-1947) que daba una lista de 147 personas, detallando nombres, edades y causa y fecha de la muerte.