En 1896 obtuvo un diploma en enfermería, y ese mismo año contrajo nupcias con el médico Stanley Marshall Rinehart, con quien tuvo tres hijos.
Posteriormente recogidas en volumen, The Man in Lower Ten (1906) y sobre todo La Escalera en espiral (1907) lograron un gran éxito.
Este último fue llevado a la pantalla en 1915 por Edward LeSaint y tiene igualmente una versión teatral bajo el título El murciélago.
Para algunas de sus aproximadamente cuarenta novelas policíacas, Rinehart creó tres heroínas recurrentes: la curiosa señorita Cornelia Van Gorder; la enfermera y detective aficionada Hilda Adams, apodada señorita Pinkerton por los servicios del orden; y finalmente, la intrépida Leticia Tish Carberry que aparece sobre todo en colecciones de cuentos.
La receta literaria de Rinehart se apega a una narración solidamente llevada, que multiplica las peripecias sin enredarse, y a una hábil dosificación entre la intriga sentimental y el cuento de misterio, añadiendo una pizca de suspenso y mucho humor.