[5] Ante el éxito inmediato de la muñeca, Atlántida también publicó la revista para niñas Marilú, editada semanalmente entre 1933 y 1936.
[7] Durante sus primeros años, Marilú fue comercializada en un local de Atlántida en Buenos Aires.
[3] La muñeca se vendía junto a una variedad de otros productos, como ropa, accesorios y muebles.
[12] Por esta razón, Marilú puede ser considerada una fashion doll, ubicándose en la genealogía de otras muñecas como las Gaultier, las Huret, o las más recientes Vogue dolls y Barbies.
[2] Como en Argentina no existía una revista para niñas con esas características, Larguía recurrió a la revista infantil Billiken —la de mayor difusión en Latinoamérica en ese momento— ya que «estaba próxima en formato e ideología».
[5] Billiken publicaba avisos y una sección semanal de moldes para que las niñas —que eran llamadas mamitas— pudieran coser ropa para la muñeca, ligándola definitivamente con la editorial.
[5] En algún momento entre 1935 y 1936, Larguía cambió de proveedor y empezó a encargar las muñecas a la firma alemana König & Wernicke, algo que duraría hasta finales de la década.
[3] También formó el club SDTS (Sobrinitas de Tía Susana), a través del cual las niñas podían escribirse, intercambiar figuritas, moldes y datos sobre Marilú.
De eso se trató la publicación, que brindaba "guiones" donde las niñas valoraban una Marilú "legítima" y las moldeaba como consumidoras».
[9] El anuncio mostraba a la muñeca escoltada por la bandera argentina,[9] junto al mensaje:
[11] Entre ellas se destacó Bubilay, muñeco bebé introducido en 1940 y presentado como el hermano menor de Marilú.
[3] En agosto de 1941, la fábrica se mudó a un local más amplio en la calle Bogado, muy cercano al anterior.
[9] En 1943, Bebilandia alcanzó su apogeo y se trasladó a su dirección definitiva: Avenida Sáenz 923, en el barrio de Nueva Pompeya.
En otros países se le da el nombre de composición (del inglés, composition).
[12] Los avisos alentaban a las niñas a cambiar y renovar la ropa de la muñeca según la ocasión o temporada, con la marca Marilú promocionando así la ropa que elaboraban para acompañar al juguete.
[7] Están marcadas en la nuca con la típica estrella de David que identificaba a esta fábrica, y el número 917, ambos incisos.
[7] La Marilú de König & Wernicke también puede ser identificada por las marcaciones que tiene incisas en la nuca, pudiendo ser una combinación de los tres elementos «K&W // Germany // 121/4/0» en distinto orden; o la otra inscripción «4/0 // Germany // Marilú», la cual resulta interesante porque indicaría que la firma realizó un modelo especial para Argentina.
[7] Desde 1940 hasta su discontinuación en 1960, Marilú se fabricó en Buenos Aires a través de la firma Bebilandia.