Mariano Estanga Arias-Girón
[2] Impulsor del clasicismo, trabajó durante muchos años en la isla, donde proyectó edificios de signo claramente históricos y en ocasiones neogóticos.Son destacables también el primitivo Casino de La Laguna (derruido), el teatro Guimerá, el Círculo Amistad XII de Enero (1904), la farmacia Castelo (1905), la clínica Pompeya (1910), el Hospital de Nuestra Señora de Los Desamparados y el Palacete Rodríguez Acero, con un destacable patio neonazarí y un salón principal neopompeyano.El último está considerado como el mejor edificio construido por el arquitecto vallisoletano y el más destacado exponente del modernismo canario.Finalmente, tuvo un papel muy destacado en Tenerife dentro de los movimientos conservadores ligados a la propiedad de la tierra durante la Segunda República española.[4] Antes del estallido de la Guerra Civil, tuvo que huir a Madrid donde murió en 1937 en la indigencia.