Maria Velho da Costa

Desempeñó también funciones en la Comissão Nacional para as Comemorações dos Descobrimentos Portugueses (Comisión Nacional para las Conmemoraciones de los Descubrimientos Portugueses) y trabajó en el Instituto Camões.

Desde el año 1975 colaboró de manera regular en guiones cinematográficos, particularmente en las películas de João César Monteiro, Margarida Gil y Alberto Seixas Santos.

Consagrada, ya en 1969, con la novela Maria Mendes, se volvió más conocida después de la polémica en torno de las Novas Cartas Portuguesas (1972), obra en que manifiesta una abierta oposición a los valores femeninos tradicionales.

Esta publicación claramente antifascista y altamente provocativa para el régimen, llevó a sus tres autoras ante el tribunal, pero el 25 de abril se interrumpieron las condenas a las que estaban sujetas las denominadas 3 Marías: Maria Velho da Costa, Maria Teresa Horta y Maria Isabel Barreno.

Las tesis de reivindicación femenina ya expuestas en Novas Cartas Portuguesas, se incrementaron, en su obra, un inconformismo en cuanto a los cánones narrativos, ese inconformismo se puede verificar también en sus ensayos.