Tras abandonar a su marido e hijos, Miguel Primo de Rivera le encargó misiones de espionaje en el Marruecos español, donde conoció a Francisco Franco (a quien salvaría la vida en dos ocasiones) y al dirigente de la resistencia rifeña contra España Abd-el-Krim y acabó convirtiéndose en agente doble, tanto para el dirigente marroquí, como para el general español.
Dos años más tarde se establece en los Estados Unidos donde realiza una controvertida exposición de sus pinturas en Boston.
Diversos pleitos le obligan a emigrar hasta Canadá, donde cambia su identidad bajo el nombre de "Teodora Álvarez" y "Mary Doe".
[4] Contrajo segundas nupcias con el abogado catalán José María Bassols e Iglesias.
[2] Acabó su vida en su palacete conocido como Casa Corte, situado en la calle Mayor, números 56 y 58 de Albacete.