María se encontraba soltera cuando su único hermano, el vizconde Gastón V, murió sin descendencia en 1170.
Ello la convertía en heredera del vizcondado, a pesar de que este título normalmente no era detentado por mujeres.
Sin embargo, los notables bearneses no aceptaron esta decisión de Alfonso y se rebelaron.
Eligieron como vizconde a un noble del vecino condado de Bigorra, al que luego ejecutaron por no haber respetado los fueros bearneses.
Entre tanto Guillermo planeó conquistar Bearne por la fuerza pero no pudo lanzar ninguna expedición.