Había residido allí desde 1676, en el castillo de Glucksburgo, en Römhild.
Enrique quería mucho a su esposa.
Siempre la llamaba "Marielies", y tenía varios lujosos edificios construidos en su honor, como una casa cueva llamada "Delicia María Isabel".
Enrique murió en 1710, dejando una enorme deuda.
María Isabel sobrevivió a su esposo por cinco años.