Teniente General y Capitán General de Manila e Islas de Filipinas.
De su gestión destaca un hecho cultural singular: en 1784 donó, con recursos de su propio bolsillo, un teatro a la ciudad de Caracas.
Tras terminar su periodo fue nombrado Gobernador y Presidente de la Real Audiencia de Santo Domingo.
El 19 de junio de 1813, acuerda imprimir un prontuario dirigido a los individuos que se van a elegir para formar la Diputación Provincial de las Islas Filipinas.
Seis ejemplares fueron remitidos al Consejo de Regencia, para su noticie e inteligencia de las Cortes.