Esta vez, los estándares no están orientados a la compresión de registros multimedia.
La existencia de redes punto a punto ponen en peligro, según las empresas del sector, el desarrollo y la producción de contenidos.
La base fundamental en la que se sostiene MPEG-21 es la definición del término de objeto digital.
Estos objetos serán los bienes con los que se comerciará dentro del mercado establecido en la red MPEG-21.
Además se especifica diferente información como los derechos de propiedad intelectual y de utilización que tiene cada usuario sobre los objetos digitales disponibles.