Sus hábitats naturales incluyen pantanos cálidos, ríos y lagos y marismas de agua dulce, aguas estancadas de pastizales y tierras agrícolas inundadas.
Cuando nacen, los renacuajos no tienen patas, salen de una masa flotante de huevos y constituyen la fase larvaria del animal.
Tienen cola y branquias, que desaparecen con el desarrollo.
Cuando aparecen las extremidades y los pulmónes, como parte de la llamada verdadera metamorfosis del animal, la rana, ya una réplica de sus progenitores, puede salir del agua a tierra.
Los machos de las especies que poseen un saco resonador que se hincha enormemente cuando la rana emite sonidos para atraer a su pareja producen un sonido mucho más intenso.