Puede estar más oscuro en circunstancias inusuales como un eclipse solar o muy bajos niveles de claro atmosférico.
Hay suficiente radiación difusa del cielo como para que las sombras no parezcan particularmente oscuras.
En términos de comparación, la luz diurna en Saturno es ligeramente más brillante que en la Tierra en un ocaso o amanecer promedio.
Incluso en Plutón el Sol sería lo suficientemente brillante como para casi alcanzar la iluminación en una sala de estar común y corriente.
En años recientes, se han hecho trabajos para recrear artificialmente los efectos de la luz diurna.