[3] Los medios locales reconocieron su trabajo, y más tarde, planificó más de cien casas, pequeños mercados, construcciones industriales e incluso iglesias evangélicas.
Se convirtió en la única arquitecta trabajando por sí misma en el sur central de Chile en aquella época, y también una de las arquitectas más prominentes en Concepción.
[4] En la década de los 40 Sobrino se radicó en Concepción junto a su marido, el ingeniero Luis Dall’Orso Franzetti.
[3][1] También son obra suya tres edificios del pasaje Portales, en Barros Arana, una de ellas su residencia y oficina.
[3] Una vez que retirada, construyó en 1972 el Hotel Alonso de Ercilla.
Hizo llamados e incluso usó su oficina como un punto de encuentro reuniéndose con más gente, especialmente madres, para participar en marchas.