Bautizada Luisa Pérez y Montes de Oca, "perdió" el apellido materno al casar con el renombrado crítico literario, intelectual y promotor cultural Ramón de Zambrana.
[2][3] A la edad de 14 años compuso su primer trabajo literario y sus versos, que recogió en un cuaderno publicado con la ayuda de los intelectuales que la rodeaban -y admiraban su poesía- en Santiago.
Contrajeron matrimonio en 1858 y tuvieron cinco hijos pero a los ocho años de casada quedó viuda.
A causa de que su vida estuvo marcada por la presencia constante de la muerte, ya que perdió a su esposo y a sus cinco hijos paulatinamente entre 1886 y 1898, su obra estuvo llena de sensibilidad, melancolía, pasión y ternura, con reflexiones religiosas y de toque filosófico sobre la muerte: estas dos últimas características se dan a notar en sus elegías.
Entre dichas obras se encuentra el libro de oraciones llamado Devocionario, La vuelta al bosque, Dolor supremo, Martirio.