Federico se había convertido a la fe calvinista con motivo del matrimonio.
Esta conversión lo llevó a estrechar relaciones con las casas principescas de Brandeburgo y Hesse-Kassel, que también eran calvinistas.
Luisa Isabel era una sobrina del elector Federico Guillermo de Brandeburgo.
Esta relación permitió a Federico alistarse al Ejército prusiano, llegando a ser comandante de todas las tropas del Electorado en solo dos años, en 1672.
La calvinista Luisa Isabel jugó un significativo papel en el asentamiento de hugonotes y valdenses desplazados en Friedrichsdorf y Dornholzhausen, así como en la formación de las congregaciones calvinistas en Weferlingen y Homburg.