Luis Landero

Luis comenzó a trabajar desde los catorce años en diversos oficios: aprendiz en un taller mecánico, recadero en una tienda de ultramarinos, auxiliar administrativo en Clesa, Central Lechera...

La muerte de su padre en 1964 dio alas al joven para dedicarse profesionalmente a la guitarra flamenca: junto a su primo fue guitarrista acompañante de diversos cantantes durante algunos años.

Aproximadamente por esta época, y a pesar de haber tenido una niñez en la que los libros estuvieron ausentes, comenzó una afición casi obsesiva por la literatura que ya no abandonaría nunca.

Estudió Filología Hispánica en la Universidad Complutense de Madrid y ejerció en la misma como profesor ayudante de Filología Francesa.

En su honor se dio nombre al Certamen Literario de Narraciones Cortas Luis Landero, que se convoca a nivel internacional para todos los alumnos de secundaria de los países hispanoparlantes.