Jugaba como arquero y su primer equipo fue Unión de Santa Fe.
[3] Durante varios torneos estuvo relegado en la consideración de los entrenadores de turno, ya que estos preferían traer refuerzos en ese puesto (por el arco de Unión desfilaron Nicolás Tauber, Enzo Noce, Leandro Evangelisti, Michael Etulain y el propio Nereo Fernández, que regresó al club).
[5] A partir de allí su situación cambió drásticamente: si bien el nuevo entrenador Fernando Quiroz lo ratificó como titular, luego de la primera fecha decidió sacarlo para poner a Luis Ojeda, la gran promesa surgida de las divisiones inferiores y que venía con participación en los seleccionados juveniles.
Todo esto, sumado a ciertos roces con la dirigencia por el tema contractual, hicieron que a finales de 2008 rescindiera su vínculo con el club y quedara en libertad de acción.
[6] Ya con el pase en su poder, arregló su vinculación con Aldosivi de Mar del Plata,[7] donde sólo estuvo un semestre.