Comenzó a estudiar dibujo, en el Opizio di San Michele, teniendo como profesor al pintor y grabador F. Giangiacomo.
Este mismo profesor, considerando que tenía condiciones para la escultura lo encamina al estudio del escultor Adamo Tadolini.
[1] Tras la muerte del papa Gregorio XVI se convocó un concurso para su mausoleo; Amici, que áún no tenía treinta añas, presentó su propuesta que resultó ganadora; concluido su trabajo en 1857 quedó situado en la basílica de San Pedro de Roma.
[2] Este trabajo acrecentó su prestigio, realizando numerosos retratos escultóricos a ciudadanos romano.
[2] Entre los números retratos que talló Luigi Amici, se pueden recordar: la estatua de Pío VIII, en el Vaticano; los bustos Pellegrino Rossi, el duque de Granata, los príncipes Drago, Terencia Mamian[3] i, los cardenales Strossmayer (Roma, Galleria Nazionale d'Arte Moderna) y Tosti (Roma, Ospizio di S. Michele); de Camillo Cavour, en el Campioglio.