Luciano Oslé y Sáenz de Medrano[a] (Barcelona, 1880-ídem, 1951) fue un escultor español.
Hijo de Rafael Oslé Carbonell y Cándida Sáenz de Medrano Oñate, fue hermano del también escultor Miguel Oslé.
[1][2] se inició como aprendiz en la fundición Masriera i Campins, donde ya trabajaba su hermano Miquel, y donde coincidieron con Manolo Hugué.
Asimismo, fueron discípulos de Josep Montserrat.
Recibió numerosas distinciones por su obra: en la Exposición de Bellas Artes de Barcelona de 1896 obtuvo mención honorífica; en 1907, primera medalla en Barcelona con La Pobladora; en 1908, primera medalla en Madrid con Presos.