El melanismo es muy frecuente en los leopardos de Indochina, una adaptación a las junglas tropicales en las que habita.
[2] En el bosque tropical denso de su distribución el melanismo es común, y además los leopardos negros cuentan con una ventaja selectiva para la caza en ese ambiente.
Su dieta consiste principalmente de monos, roedores, reptiles, anfibios, aves, peces, cerdos salvajes y ungulados; en Malasia se analizaron tan solo 4 heces las cuales contenían pelos de jabalí (n=3) y macaca sp.
Cuando captura un animal, lleva su presa hasta los árboles para comer.
Se encuentra distribuido por gran parte del sudeste asiático: en el sur de China, Bangladés, Bután, Camboya, Laos, Malasia, Singapur, Myanmar, Tailandia y Vietnam.