Lee Iacocca

La revista Portfolio lo nombró como el 18.º gran CEO estadounidense de todos los tiempos.

Su padre había ido al Lido mucho antes de su matrimonio viajando con su futuro cuñado.

[6]​ Iacocca se graduó con honores del Allentown High School en 1942 y de Lehigh University en la vecina Bethlehem (Pensilvania), con una licenciatura en ingeniería industrial.

[7]​ Iacocca se unió a la Ford Motor Company en agosto de 1946, después de una breve práctica en ingeniería, aceptó su cambio a ventas y mercadeo, donde florecería su carrera.

Mientras trabajaba en el distrito Philadelphia como asistente del gerente de ventas, Iacocca ganó un reconocimiento nacional con su campaña "56 para '56" ofreciendo préstamos en autos modelo 56 con un 20 % de descuento y $56 dólares en pagos mensuales por tres años.

Un factor significativo en su opinión era su preocupación por los automóviles importados, que cada vez abarcaban más el mercado estadounidense compitiendo en economía de combustible y calidad.

Por otra parte, quienes fueron sus empleados directos consideraban a Iacocca como un jefe duro, excesivamente trabajador, confrontacional y muy exigente.

Los estadounidenses no querían tanto el motor de auto deportivo sino la apariencia.

Su monovolumen Dodge Caravan/Plymouth Voyager, introducido en 1983, fue uno de los vehículos más vendidos en Estados Unidos.

[15]​[16]​ También introdujo los modelos "K", de cuatro cilindros y con un consumo de combustible mucho menor que los automóviles, hasta ese momento, estándar, lo cual hizo disparar las ventas a niveles impresionantes.

[19]​ También expresó lo que se convertiría en su frase característica: "Si puede encontrar un auto mejor, cómprelo".

Iacocca residió en la sección Bel Air de Los Ángeles en sus últimos años.

Hugo of the Hills y fue enterrado en el Cementerio Memorial White Chapel en Troy (Míchigan).