Lechecillas es el término gastronómico para el timo y el páncreas,[1] especialmente de ternera y cordero, si bien también se consumen los de buey y cerdo.
A veces, se llama a esta asadura blanca «mollejas», término que también alude a una parte del intestino de ciertos vertebrados.
[2] Una forma típica de preparar las lechecillas es remojarlas en salmuera, escalfarlas en leche y retirarles después la membrana exterior.
Una vez secas y enfriadas, a menudo se empanan y fríen.
En muchas cocinas latinoamericanas se hacen a la parrilla, como es el caso del asado argentino, y también figuran en la cocina turca (uykuluk).