Las Cañitas (Inés de Santa Cruz y Catalina Ledesma)
Las Cañitas era la denominación popular que se dio a Inés de Santa Cruz y Catalina Ledesma, dos mujeres lesbianas españolas del siglo XVII procesadas por la Inquisición.Aunque, tras muchas vicisitudes judiciales, fueron condenadas a azotes y destierro, obtuvieron finalmente el perdón real.[2][3] En las actas del proceso, con un lenguaje muy descriptivo (utilizan la denominación "bujarronas"), se testimonia el uso de un consolador, al que debían su mote: trataba la una a la otra con un artificio de caña en forma de natura de hombre ... Con sus manos la abría la natura a la dicha Catalina hasta que derramaba las simientes de su cuerpo en la natura de la otra por lo cual las llamaban Las Cañitas y esto es público y notorio entre las personas que las conocen.Un proceso por lesbianismo a principios del siglo XVII (2013).[2]Posteriormente, ha sido novelada en No somos flacas mujeres, de Miguel Ángel Márquez.