Lars Onsager

En 1928 viajó a Estados Unidos para aceptar la oferta de la Universidad Johns Hopkins de Baltimore para convertirse en profesor de química, cargo que abandonó al final del primer semestre al observar que no tenía talento para la docencia.

En 1926 publicó sus datos y viajó hasta Zúrich para ponerlas en conocimiento de Peter Debye.

Este quedó tan impresionado que lo invitó a quedarse con él en el Instituto Politécnico Federal de Zúrich, donde estuvo hasta 1928.

Estos trabajos no tuvieron resonancia en su momento, pero después de la Segunda Guerra Mundial fueron reconocidos y finalmente en 1968 le fue concedido el Premio Nobel de Química por todos ellos.

Posteriormente se interesó por las propiedades de fluidez del helio líquido, llegando a las mismas conclusiones que dos años antes había descrito el físico Richard Feynman y de las cuales no tenía conocimiento.