El nombre de la laguna es de origen chiquitano y significa "pez hediondo".
[2] En 1956, por iniciativa del Club de Caza y Pesca de Roboré, se decidió represar las aguas de la laguna con la finalidad de formar una reserva piscícola, represa que se mantuvo hasta el desastre ecológico de inundaciones y mazamorras del año 1979.
En 2012 a través del Servicio de Encauzamiento de Aguas y Regularización del Río Piraí (SEARPI), se iniciaron trabajos de limpieza, colocación de trampas sedimentadoras y procesos de reforestación, que contribuyeron a provocar un impacto positivo al ambiente.
[1] El 2019 se produjeron unos intensos incendios en la Chiquitania que afectaron también los alrededores de la laguna Sucuará, afectando parte de su cobertura vegetal.
[3] En el área boscosa se han registrado diversas especies de animales como el taitetú, el chancho tropero, el gato del monte, el anta, el oso hormiguero bandera y el tejón, entre otras especies de aves y mamíferos.