[1] Ambas obras permanecieron en la Academia hasta la Revolución Francesa, cuando fueron trasladadas al nuevo Museo Central de las Artes, el actual Museo del Louvre.
El pescado yace encima de una repisa en la que a la derecha hay varios elementos domésticos sobre un paño blanco: una sartén, una olla y una espumadera de metal, una jarra de cerámica, una botella y un cuchillo.
La composición se puede analizar como una serie de pirámides, con la raya puntiaguda en el centro, la jarra y otros objetos inanimados a la derecha, y los seres vivos el gato y las ostras a la izquierda.
El mango del cuchillo que cuelga de la repisa y la esquina de la pared de piedra que pasa junto al gato y se aleja del espectador, agregan profundidad a la escena.
Aunque Diderot la describió como "repugnante", la peculiar pero realista composición fue admirada por otros artistas, entre ellos Matisse.