[3] Con respecto a las ilustraciones, los grabados que la acompañan han sido reelaborados varias veces, y sus diseños se atribuyen a cuatro o cinco artistas, de los cuales todos menos uno son anónimos.[4] En cuanto a los antecedentes personales, es sabido que Brant había publicado durante los años precedentes una serie de hojas volanderas (primero en latín, luego en alemán) en las que se solía incluir una pequeña ilustración, contando sucesos relevantes o noticias curiosas.La unidad vendría dada entonces por la lengua y la versificación, por la figura del necio como personaje central, por su ubicación en una nave o por el estilo emblemático.Es importante también apreciar que la literatura medieval (así como el propio Brant) no hacía distinciones entre los tipos clásicos de necedad latina (stultus, fatuus, insipiens y demens).La influencia de Brant llega a Rabelais o más recientemente al estudio de la necedad formulado en el célebre ensayo del economista italiano Carlo Maria Cipolla titulado Allegro ma non troppo.
La
Stultifera Navis
de viaje al País de los Tontos. Grabado en madera de 1549
Interpretación del
Bosco
de la Nave de los necios.