Desde 1968, la glorieta alojaba una cafetería proyectada por el arquitecto Julio Ruiz Olmos.[1] El pequeño edificio se caracterizaba por su racionalismo estructural, sus grandes voladizos y sus espacios diáfanos, con claras referencias a la arquitectura de Mies Van der Rohe.En su lugar se instalaron una fuente y la escultura de Eusebio Sempere La Pirámide.En la parte superior del muro hay 160 surtidores que crean una cortina de agua.La escultura se sitúa sobre una base con un motor que la hace girar, produciendo con la rotación efectos ópticos y reflejos.[7] En la actualidad el delfín se encuentra en mal estado y con el armazón metálico visible.