La Fontana de Oro fue una fonda y luego café que existió desde finales del siglo xviii en Madrid.Así la describe Benito Pérez Galdós en su primera novela publicada, y titulada con el mismo nombre del histórico establecimiento.[nota 3] Emprendiendo la escritura de la fue su primera novela publicada, Galdós, al inicio del capítulo II, la dibujó así:[3]En 1843 la vieja Fontana fue adquirida, junto con las fincas adjuntas, por el súbdito francés Casimir Monier, empresario innovador que ya antes había abierto librería y un local de baños.[2] A finales del siglo XX, un «pub» de estilo irlandés abrió sus puertas con el nombre del antiguo café y fonda en el lugar aproximado en el que estuvo la Fontana.