En 1605, las campanas informaron a los residentes sobre la llegada de Dimitri I el impostor, y Tula durante dos semanas fue convertida en la pseudo capital del estado de Moscú.
Fue allí en el Kremlin, donde juró lealtad a los pretendientes boyardos y nobles.
En 1608, el zar Vasily Shuisky fue asediado por los líderes del movimiento campesino: Ivan Bolotnikov e Ileyko Muromets.
A mediados del siglo XVII, el Kremlin perdió completamente su significado.
En 1930, las paredes del Kremlin fueron totalmente removidas de los edificios en ruinas; en la década de 1950 tuvieron una renovación parcial, y a mediados de 1960 se realizó una restauración científica completa y compleja para restaurar la apariencia original del Kremlin.
Al mismo tiempo, el fondo restauró la Catedral de la Asunción, cuya fachada tiene un color gris, y las cúpulas cubiertas con pan de oro.