Dimitri I «El Falso» consiguió el trono después de asesinar al zar Teodoro II, que nada más tenía dieciséis años y hacia dos meses que reinaba en Rusia.
Dimitri apareció en la historia alrededor del año 1600, cuando impresionó al Patriarca Job de Moscú con su sabiduría y seguridad.
Sin embargo el zar Borís ordenó que fuera arrestado y examinado, por lo que Dimitri huyó y se refugió en la corte del príncipe Constantino Ostrogsky de Ostrog (moderna Ostroh); más tarde entró al servicio de otra familia lituana, los Wisniowieckis.
Algunos boyardos comenzaron a aceptar las reivindicaciones de Dimitri debido a que esto les daba una excusa legítima para no pagar impuestos al zar, mientras otros aristócratas rusos vieron en Dimitri una herramienta para sublevarse, atacando la legitimidad de Godunov.
Además, consiguió tras muchas gestiones la ayuda oficial del reino de Polonia-Lituania, ya que el rey Segismundo III Vasa le dio 3.500 soldados.
La primera la ganó Dimitri, capturando Chernígov, Putivl, Sebsk y Kursk, pero fue derrotado severamente por las tropas leales a Godunov en la segunda batalla y su ejército estuvo a punto de disgregarse, lo cual solo fue evitado por los grandes esfuerzos de los nobles polacos.
Al inicio el nuevo zar intentó consolidar su poder, visitó la tumba del zar Iván el Terrible y fue al convento donde estaba recluida la viuda de Iván, María Nagaya, quien lo aceptó como su hijo.
Además, las principales familias de la aristocracia rusa veían alarmadas que el nuevo zar se apoyara casi exclusivamente en caudillos militares de la szlachta polaca y postergara a sus aliados rusos.
Esta situación inusual hizo pensar que Dimitri había prometido a sus partidarios polacos (y además católicos) convertir Rusia al catolicismo después de ganar el trono.
El hecho de que casi todos los clérigos católicos llegados con Dimitri fuesen polacos hacía más detestable e impopular esa perspectiva.
Este intentó escapar por una ventana, pero se fracturó una pierna al caer, y uno de los conspiradores le disparó matándolo en el acto.