Con 19 años, Kleyr debutó con la camiseta del São José, jugando por el club solo en el 2000, después fue transferido al Goiás, permaneciendo en el equipo ‘Verdão’ hasta 2002, cuando fichó por el Vila Nova, el encarnizado rival.
Después de aquella experiencia en la cual le costó mucho ser titular, el ariete brasilero deambuló por varios clubes.
En 2004 militó en el Varzim de Portugal, Portuguesa y Ponte Preta, sin ganar la titularidad.
En 2005 jugó en Botafogo y en el equipo de su ciudad natal: Rio Branco FC.
Hasta 2008 jugó en elencos como Anapolina, FC Vilnius, Gloria Buzau, entre otros.