Killers (película)

Spencer (Ashton Kutcher) es un agente secreto que trabaja para un jefe oculto.

Cuando Spencer conoce a la bella y divertida Jen (Katherine Heigl), mientras veranea junto a sus padres, decide dejar su angustioso y estresante trabajo para así poder casarse con ella y llevar una vida matrimonial lo más normal posible entre los dos.

Sin embargo la felicidad en el matrimonio durará muy poco, debido a que han puesto precio a la cabeza de Spencer, nadie sabe quién ha podido ser el que haya dado la orden de asesinarle, ¿sus amigos?, ¿sus vecinos?, ¿familiares?...

[2]​ Se filmó en diferentes ciudades de Estados Unidos como Atlanta, Woodstock, Marietta o Douglasville; asimismo también se rodaron algunas escenas en Villefranche-sur-Mer, Francia.

El presupuesto estimado invertido en la producción fue de 75 millones.