Son notables los tres puentes construidos sobre el IJssel que conectan Kampen con la ciudad de IJsselmuiden, así como el molino d’Olde Zwarver.El suelo terminó por convertirse en arena y el viento del noreste comenzó a formar montañas.La Edad de Hierro trajo riquezas a los Países Bajos porque dicho mineral se encontraba en diversas formas por todo el territorio.Por el año 250 a. C., el pueblo de los Frisii dominó todo el territorio del entonces lago Flevo hasta el río Ems, Alemania.[5] Debido a lo anterior el río IJssel era conocido en antiguo germánico como Hisloa o Hisla, vocablo que significa agua turbia.Primeros asentamientos Las constantes inundaciones provocadas por la interacción del clima, el mar y el lago Flevo hicieron muy inestable el florecimiento de grupos en los litorales.El Almere se transformó en un gran cuerpo de agua llamado el mar del sur o Zuiderzee, un lugar rico en flora y fauna.Alrededor del año 1 000 asentamientos permanentes se restablecieron en la zona que Kampen ocupa en la actualidad.En las dunas del río IJssel surgieron las presentes ciudades de Wilsum, IJsselmuiden y Zalk.Como los terrenos más altos estaban ocupados, los pioneros buscaron refugio en la parte oeste del río IJssel.La ciudad adquirió derechos como tal hasta 1236 en gran medida por el soporte político, económico y financiero del señor de Buckhorst ya que este floreciente puerto se localizaba en sus territotios.Empoderamiento En 1302 se construyeron los primeros diques en los alrededores de Kampen como medida para controlar las constantes inundaciones provocadas por la crecida del río.El área ocupada por este caudal era entonces el lugar adecuado para el intercambio de productos entre los pueblos alojados en el litoral del Zuiderzee y el Sacro Imperio Romano Germánico.Considerando que hasta el siglo XII virtualmente no existían caminos sobre tierra firma al norte del área de los llamados Grandes ríos neerlandeses ─Bajo Rin, Lek, Waal, Merwede y el Mosa─, toda mercancía era transportada por barcos.Al estar ubicado convenientemente en la vertiente del río IJssel, Kampen era el punto de transbordo entre las grandes embarcaciones y los pequeños botes.La zona comercial dio origen a lo que hoy es la calle principal de la ciudad: Oudestraat.Por mucho tiempo la ciudad no quiso firmar cualquier tipo de concesión política o económica que la uniera con otras ciudades, especialmente aquellas pertenecientes a la Liga Hanseática.Gracias al intercambio comercial que protagonizó la hansa durante este periodo, estas ciudades consiguieron ampliar sus conocimientos navales; aprendiendo, por ejemplo, como construir barcos más eficientes.Sin embargo los roces se incrementaron cuando Kampen comenzó a cobrar impuestos por la navegación en las aguas del IJssel.El gobierno centralizado de Felipe II y su rechazo hacia los religiosos protestantes provocó mucha inestabilidad en la población neerlandesa.Por si fuera poco la nueva división del territorio en Diecisiete Provincias generó el descontento de las noblezas locales quienes veían disminuido su poderío.Kampen y Zwolle no estaban conformes con el protagonismo económico que ejercía la nueva sede del gobierno localizada en Bruselas.Aunque ferviente católico y leal a las autoridades, Toe Boecop solía ser muy tolerante con los protestantes establecidos alrededor del IJssel.Por esta razón en un principio no hubo ataques a las iglesias de Kampen o el Oversticht durante la reforma protestante.Durante este periodo estalló un conflicto armado entre Francia, Münster, Colonia (Alemania) e Inglaterra contra las Provincias Unidas.A este enfrentamiento se le conoce como la Guerra Franco-Holandesa y significó la debacle para el enorme poder de la ciudad.Los rehenes fueron liberados después de que su propia familia y amigos, mas no la ciudad, pagaron el rescate.Después de la ocupación francesa Kampen fue reconquistada y Guillermo III dispuso un gobierno provisional.Las provincias neerlandesas que se rebelaron contra el enemigo veían a la población de Overijssel como cobardes no sólo porque difícilmente se resistieron a la ocupación sino porque simpatizaron con la iglesia católica y algunos nobles incluso reconocieron al obispo de Münster como su soberano.Las regiones, ciudades y pueblos estaban fuertemente subordinados a la figura del Rey: Guillermo I de los Países Bajos.
Geografía de los Países Bajos, 500 a. C. En el centro: El lago Flevo